Parece que el tiempo comienza a mejorar, no hay nada peor que un día nublado y que encima no caiga ni una gota de agua, como ayer, hoy parece que va a brillar el sol (jo, parezco la del parte meteorológico).
Bueno vamos con la entrada de hoy, sin entrar en el debate de chupete si o chupete no, os tengo que contar que a mi me fue de gran ayuda el chupete en la crianza de mis mellizos.
Mis hijos lo cogieron desde el principio y me ayudaba mucho para calmarlos sobre todo en las siguientes situaciones:
ü Mientras esperaban su turno en cada toma.
ü Cuando se despertaban por las noches.
ü Si se ponían pesados durante el paseo (les ponía el chupete se lo movía un poquito en la boca para que lo cogiesen y se calmaban prontito).
ü Para darles las papillas (cuando no querían abrir la boca les ponía el chupete delante y cuando la abrían les metía la cuchara, este truco me lo enseñó mi amiga Cristina y ahora se lo enseño yo a mis amigas primerizas ¡¡es infalible¡¡).
En el mercado podemos encontrar chupetes con 3 tipos de tetinas:
1. Las tetinas de forma fisiológica (son planitas y no deforman el paladar).
2. Las tetinas de forma anatómica (se adaptan a la forma del paladar del bebe).
3. Las tetinas con forma cereza (son totalmente redondas). Mi dentista y amiga Mirian, me dijo que las tetinas con forma de cereza deforman el paladar a los bebes, así que yo no las use.
Además las tetinas pueden ser de látex (las de color ambar) o de silicona (las transparentes). La diferencia entre el látex y la silicona es que el látex es más blandito y suave, pero con el tiempo se hincha y coge olor, mientras que la silicona no coge olores, es mas resistente y por tanto tiene mayor durabilidad. Sin embargo no es mejor el látex que la silicona, es cuestión de lo que mas le guste a los bebes, por ejemplo a mis hijos les gustaban mas las tetinas de látex.
Cuando mis hijos nacieron y les puse los chupetes que llevaba preparados me quede pasmada ¡¡los chupetes eran casi mas grandes que su cara¡¡ (y eso que mis hijos nacieron muy grandes), así que mi preciosa hermana se fue corriendo a buscar unos chupetes adecuados y por supuesto los encontró ¡¡eran chiquititos y preciosos¡¡ (de la marca Suavinex).
La marca Suavinex (que como os he comentado en alguna ocasión me gusta mucho) ha pensado en estos bebes mas pequeñitos y por eso desarrolla su chupete con forma de mariposa Fusión con tetina de látex de -2 a 6 meses, para nuestros bebes son los ideales sin duda alguna, os los recomiendo.
Conforme María y Alejandro iban creciendo comencé con mi compra masiva de chupetes de todo tipo, era entrar en una farmacia y me volvía loca, nunca han tenido problema para cambiar de chupete lo que me permitía según la ropa que llevaban ponerles uno u otro (vamos que iban siempre hechos un primor ¿Qué voy a decir yo que soy su madre?).
La empresa murciana tutete, nos da la posibilidad de personalizar los chupetes de nuestros bebes poniendo su nombre o alguna frase graciosa, personaliza artículos de todo tipo, no dejéis de visitar su página Web http://www.tutete.es/ os aseguro que os sorprenderá. La creadora de la empresa Teresa Olivares es una chica súper creativa y encantadora (no me sorprende que haya creado esta empresa), ahora podemos ver sus artículos por toda España.
Cuando mis hijos comenzaron la guardería llevaban cada uno un chupete personalizo con su nombre de esta empresa. Un día, los mandé a la guardería con otro chupete y ¡¡sorpresa¡¡ cuando fui a recoger a los niños la profesora me pidió que por favor les pusiese los chupetes con su nombre, que le parecían geniales para no confundirlos ¿a que son chulísimos?
Me encnatn los que llevan el nombre...superprácticos para las mamás gemelares
ResponderEliminar( conozco bien la experiencia en primera persona)
Un abrazo muy fuerte
Cecilia
Mis niñas casi no los usan, pero han llevado siempre los de los nombres, que nos regalaron al nacer, casi siempre para jugar o usar de mordedor... la mellizas algo más, a la noche sí lo usa. La verdad es que les calma un montón, y es una pena que las gemelas no lo quieran por la noche también. Pero me consuelo pensando, que una cosa menos que quitar!
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